lunes, 14 de octubre de 2013

En el Baúl de los Recuerdos...

Óleo sobre cartón copia de la Persistencia de la Memoria de Eugenio Salvador Dalí, ejercicio de pintura.
A veces, uno en la carrera se dedica a hacer una cantidad ingente de producción, toda inconclusa, con ese aire de "prisa" de ejercicio, de análisis y titubeo. La mayoría de las ocasiones no había tiempo para el detalle, para la filigrana, para el mimo...

Ya desde bien pequeña demostré tener no mucha paciencia con proyectos que se alargan en el tiempo, siempre me gustó el aquí y ahora, la necesidad imperiosa de volcarlo todo en un mismo momento.
Este cartón, fue un trabajo de algo que había visto muchas veces, pero que, cuando se me encargó en la Facultad como ejercicio, allá unos 7 años atrás, canalizó un poco ese ímpetu.

Siempre me gustó Dalí (por entonces algo denostado en algunos círculos) pero a mi me fascinaba su trazo. Me fascinaba como era capaz de deformar la realidad que tanto me costaba a mi, reflejar en mis esbozos, con esa limpieza y análisis propios de un genio. Elegí este tema, ya que el ejercicio se basaba en la copia estrictamente de una obra de un autor a nuestra elección y Dalí se me presentó como un mentor canalizador de esa furia descontrolada que sentía cuando algo me absorbía.

De normal, en todo dibujo,o cuadro que hago, suelo al cabo del tiempo, cogerle manía, como si dijéramos, sin embargo no pasó así con esta copia en cartón de ejercicio de esta fantástica obra de Eugenio Salvador Dalí, y tras años entre mis carpetas, sigue arrancándome un henchido orgullo al saber, que es imposible alcanzar su gloria, pero si la de uno mismo con esfuerzo y diligencia.

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